CREU DE GURB I CALÇOTADA

Iniciamos nuestra excursión desde la parroquia de Sant Andreu de Gurb, en la comarca de Osona, para subir al Puig de la Creu de Gurb, siguiendo las marcas amarillas y blancas del PR C41. La niebla espesa nos impide disfrutar de unas vistas panorámicas, pero aún así el camino tiene una gran belleza ya que pasa por un terreno curioso de márgenes y cárcavas arcillosas muy características de la Plana de Vic. Un tramo empinado entre el bosque nos pone en fila india y nos hace resoplar a más de uno. En poco más de una hora nos encontramos en la cima, donde ondea una senyera catalana y hay una enorme cruz y una tabla de orientación (hoy con la niebla, en paro forzoso,...). En un día claro y despejado este lugar es un magnífico mirador, doy fe.

De vuelta a los coches y nos dirigimos hasta la población de Manlleu, donde antes de ir a comer damos un paseo cerca del río Ter y podemos ver un raid con bellos caballos árabes. Después del paseo toca calçotada, en el restaurant El Morter. Lugar encantador muy recomendable donde pasamos un buen rato y comemos muy bien.

Es un placer poder disfrutar de estos buenos momentos con tantos amigos y por supuesto, con mis padres, que hoy se han atrevido a compartir esta aventura con nosotros (qué valientes son!!!!!), a más, mi padre nos ha deleitado con alguna de sus poesías (de las cortitas,...).

Antes de despedirnos, nos damos un paseo por la población de Manlleu, donde nos llama la atención la iglesia y sus cantos rodados (vaya trabajo,...).

Excursión multitudinaria que hemos compartido: Adela, Ana, Ana Mancebo, Angelita, Antonia, Carola, Cristina Andreu, Gloria, Imma, Mª José, Monchi, Montse, Noemí, Svetlana, Yolanda, Edu, Gonzalo, Joan, Jordi, José A. Fernández, José A. Prera, José Leiva, Juan Carlos, Mariano, Paul, Roberto, Santi, Teo, Tomás, Vicente y yo. Gracias por vuestra participación y entusiasmo.