VALL DE BOI

Después de casi 300 kms de carretera llegamos a Taüll, en La Vall de Boí, donde nos encontramos con los afortunados que vinieron ayer (pudieron disfrutar de la fiesta de las antorchas que se celebra en Erill La Vall). Nos dirigimos hasta la estación invernal de Boí-Taüll con la intención de subir a algunas de sus cimas más representativas. Empezamos subiendo al Cerví de Durro, muy buenas vistas, a pesar de la calima y la altas temperaturas, apenas queda algún nevero (así que aprovechamos para pisar nieve y hacer alguna foto,...). Pasamos junto a los parados remontes de esquí, que esperan pacientes las nieves del invierno,...

Pasamos el Port d´Erta y el Pas de Llevata, y bordeando el Tuc del Muntanyó, (donde unos curiosos rebecos nos vigilan), enfilamos la subida al Puig Falcó, punto más alto de la estación invernal, 2729 mts, (en muchos mapas, aparece esta cima con el nombre de Cap de Raspes Roies).

Disfrutamos del entorno y la tranquilidad, no nos hemos cruzado con nadie en toda la excursión. La bajada la hacemos por la directa, buscando un tartera y bajando a saco,... (esto me recuerda a la tartera del Pedraforca hace 25 años, cuando había mucha piedra y se podía derrapar sin problemas).

Ducha relajante en el camping Taüll y después de comer tranquilamente (algunos hacen la siesta), vamos al Centre del Romànic de la Vall de Boí en Erill la Vall, para conocer un poco las maravillas de este arte. Visitamos la población y fotografiamos la esbelta iglesia de Santa Eulàlia.

Continuamos hasta la población de Boí, para ver la iglesia de Sant Joan y pasear por sus calles, y por último, vamos hasta la iglesia más conocida y fotografiada del valle: Sant Climent de Taüll, en su interior, destaca la pintura del Pantocrator. Caminamos hasta el interior de la población y contemplamos la iglesia de Santa Maria de Taüll.

El día siguiente, después de levantar el campamento, hemos decidimos hacer una excursión "sencilla" hasta el refugio Ventosa Calvell, dentro del Parc de Aigüestortes.

Dejamos los coches bajo la presa de Cavallers y bordeando este tremendo embalse arroyos y contemplando un paisaje de gran belleza donde el verde y el agua cantarina hacen una perfecta combinación. Pasamos junto a la cascada de Riu Malo y llegamos por sendero bien balizado con estacas pintadas de amarillo hasta el Estany Negre, las vistas de los Bessiberris con mucha nieve nos cautivan a todos, cuanta maravilla!!!!!

Sin llegar al refugio, nos volvemos, el tiempo apremia y hoy todos queremos estar pronto en casa para ver como nuestra selección de futbol hace historia y moviliza a todo un país.

El fin de semana ha sido más que bien aprovechado y lo hemos compartido: Conxita, Cristina, Mª José, Montse, Silvia, Félix, Jaume, Robert, Tomás y yo.

Ha sido un placer VIVIR estos momentos con todos vosotros.